Artwork by Dalton Buddy James

Jane Hill

University of Arizona, Department of Anthropology

La pre-historia lingüística de los pueblos uto-aztecas

Cultivadores del maiz llegaron al altiplano de Colorado a principios del segundo milenio A.C.  Allá encontraron una variedad distinta de flora y fauna y una serie de retos medioambientales diferentes de los que cultivadores habían enfrentado previamente en la diseminación del cultivo de maíz (y probablemente los cultivadores mismos) del altiplano mexicano. La  evidencia lingüística sugiere que uno de sus estrategias en acomodarse al nuevo medioambiente era de formar lazos sociales con, y solicitar el conocimiento de, las poblaciones locales de cazadores-recogidores.  La evidencia toma su forma con una serie de palabras para las plantas de importancia económica que se encuentran solamente en las lenguas uto-aztecas norteñas, incluso el pino piñon, los encinos de bellota, Apocynum, Chrysothamnus, Carum gairdneri, y Calochortus entre las plantas.  La palabra uto-azteca norteña para un animal grande de caza prototípica, que significa venado o tambien antílope, puede ser un préstamo similar.  Yo propongo que esta serie de palabras fue apropiado por los parlantes del proto-uto-azteca norteña de los parlantes de una lengua ancestral a las lenguas modernas kiowa-tanoa.  En turno, la comunidad ancestral kiowa-tanoa parece haber tomado como suyo algo del vocabulario del cultivo de maíz del proto-uto-azteca norteña.